jueves, 14 de febrero de 2008

Una grata noticia, Oscar Mario González Periodista independiente




Días atrás desde la distante pero solidaria Suecia nos llegó la grata noticia de la proposición como candidato al Premio Nobel de la Paz, del líder opositor cubano y Coordinador Nacional del Movimiento Cristiano Liberación (MCL), Oswaldo Payá Sardiñas.

La propuesta corrió a cargo de seis miembros del parlamento de ese país escandinavo como reconocimiento a la labor pacífica desarrollada por Payá Sardiñas en defensa de los derechos humanos del pueblo de Cuba. Por su tenaz y persistente trabajo en aras de los derechos civiles frente a uno de los gobiernos más represivos e intolerantes del planeta.

Los impulsores de la propuesta son Lennart Sacredeus (democratacristiano). Urban Ahlin (socialista), Úrica Karlsson (de los moderados), Bodil Ceballos (de los verdes), Fredrick Federley (centro) y Cecilia Wikstron (populares).

La oferta de los parlamentarios suecos se hace en momentos de gran incertidumbre acerca del futuro político de nuestro país. La sola propuesta constituye, en si misma, un reconocimiento a toda la oposición pacífica de la Isla.

El hecho ha de verse en su doble significado.

De una parte constituye una gratificación al trabajo desarrollado por el insigne luchador pacífico cubano. También y por extensión, representa un homenaje y un estímulo para todos los luchadores por la democracia que a lo largo de medio siglo han dado lo mejor de sí para que un día nuestra patria pueda ocupar el sitial que por derecho propio le corresponde en el concierto de las naciones libres.

Con seguridad la noticia ha de llenar de gozo los corazones de los más sufridos entre los que sufren: los presos políticos y de conciencia cuyos cuerpos languidecen tras las rejas del horrendo presidio del castrismo. Estos últimos, por el delito de amar a Cuba y porque al influjo de tan amoroso sentir levantaron sus voces reveladoras del dolor y denunciantes de los perpetradores de tan añejo sufrimiento.

Ojala el Comité de la Fundación Nobel vea en la persona de nuestro querido compatriota Oswaldo Payá los méritos que le hagan acreedor de tan honrosa distinción. Ojala y podamos agregar a los motivos de orgullo implícitos en los Premios Sajarov 2002 y 2005 otorgados al propio Oswaldo Payá y a las Damas de Blanco, el próximo Nobel de la Paz.

Sería un triunfo rotundo para todos los que se esfuerzan por hacer dichosa a Cuba dentro y fuera de sus costas. A los del exilio para que un poco de luz del cielo cubano aplaque y suavice el dolor y la añoranza. A los de adentro, desde Guanahacabibes hasta el poblado de Maisí, para que el compromiso de hacer dichosa a Cuba tenga a sus campos florecientes de escenario y por testigo a las palmas reales.

La Asociación pro Libertad de Prensa (APLP) se identifica con el regocijo de todo el pueblo y en particular con el gozo de los luchadores pacíficos por la democracia y la libertad. Hace votos porque el honor del premio instituido por el sueco Alfred Nobel, recaiga sobre la persona de nuestro hermano Payá. Esto sería un justo reconocimiento a más de dos décadas de esfuerzos y privaciones en aras de un futuro de libertad, paz y progreso para todos. Por el derecho (como bien él dice) de los cubanos, a tener derechos.
Playa, La Habana, 13/02/2008
Http://prolibertadprensa.blogspot.com/

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