POESÍA, Mi niño soñó

Mi niño soñó con un gran cobertizo
donde las nubes hacían malabares
y caían ufanas sobre la nueva casa
Pero mi niño no sabe que mi verdad resume
todas las perspectivas
y erosiona desafiante en su deseo
Tampoco sabe que no soy ambidiestra
y en nuestra vieja sartén sólo el polvo se fríe
Que su sueño desemboca en mi impotencia
y aunque grite fuertísimo nadie respondería
Ni siquiera me atrevo a atizar su inocencia
diciéndole que mañana habrá probabilidades
ni que en mi cuenta de ahorro sólo existen ideas
Hoy mi niño soñó con una nueva casa
sin saber que su abuela no atesora futuro
Que no es más
que una simple proscrita barajando papeles
una mujer de pueblo que pasa inadvertida
Adela Soto Álvarez, “Días anímicos y anémicos”
Primer Premio Poesía,
Concurso Literario El Heraldo,
2002