jueves, 17 de julio de 2008

Sin derechos y esperanza Editorial # 29


El opositor cubano Francisco Chaviano González pidió permiso a las autoridades para salir a las calles y realizar una demostración pacífica. Por toda respuesta, fue arrestado por la policía de Seguridad del Estado. Un trámite sencillo que conlleva un derecho real en los países democráticos, en la Cuba del general Raúl y su gobierno dictatorial totalitario es un acto susceptible de represión y arrestos.

Quienes preguntan si algo cambió o cambiará en Cuba, encontraron sus respuestas. Como dijo el poeta, ‘una rosa es una rosa’, nosotros por acá decimos: Una dictadura es una dictadura.

Agenda Para la Transición se ganó en buena lid las palmas de la represión política del régimen. En estos momentos gana espacio y popularidad entre las mayorías desesperanzadas de Cuba. De ella se espera el trabajo político adecuado que coloque más temprano que tarde al pueblo en las calles en demanda de sus derechos legítimos conculcados.

Ojala que no se pierda otra oportunidad como se perdió el ‘momentum’ del Proyecto Varela hace ya algunos años. La dictadura tiene su cita concertada con el pueblo en las calles de Cuba. Se está cada vez más cerca de una confrontación entre el pueblo explotado y sin derechos de la Isla y sus angustiadores tradicionales.

En un proceso irreversible, el pueblo comenzó a mirar hacia adentro. Es menos riesgoso enfrentar una dictadura minada por la corrupción, que a los tiburones hambrientos del Estrecho de La Florida.

Por lo pronto, una pregunta que gravitó durante largo tiempo parece haber encontrado respuesta. La oposición interna es capaz de colocar varios miles de cubanos en las calles; la dictadura es capaz y tiene la capacidad para masacrarlos. Quizás este sea el nuevo dilema que tienen frente a si los líderes nacionales del movimiento opositor interno. Veremos como se resuelve.
SDP

1 comentario:

Anónimo dijo...

El periodista que escribió el editorial conoce a su pueblo. Lanza un llamado a la cordura y al patriotismo. El gobierno responde endureciendo la represión. Están tan engrandecidos que se han olvidado de sus propios comienzos. Las personas pensantes en Cuba le han dado todas las oportunidades para que haya una apertura política, pero todo apunta a que la borrachera que ya dura 50 años, se va a acabar como la fiesta del guatao.