jueves, 22 de mayo de 2008

La historia que no contó Mesa Redonda, Laritza Diversent Cámbara





Arroyo Naranjo, La Habana, 21/05/2008 (Semanario Digital Primavera) El gobierno cubano olvido concientemente contar detalles importantes que nuestro pueblo y la opinión publica mundial tienen derecho a conocer referente a la vida y obra de las Damas de Blanco.
En junio de 2003 el régimen cubano encarceló a 75 disidentes y ordenó fusilar a tres secuestradores de una nave marítima usada para emigrar a los Estados Unidos. Estas acciones provocaron una crisis diplomática de gran envergadura. Alcanzó incluso a la Unión Europea (UE), situación que provoco el aislamiento de la nación a nivel internacional en esa época.
Entre las personas encarceladas se encontraban defensores de los derechos humanos, periodistas independientes, bibliotecarios y miembros de la oposición. El gobierno ha liberado a unos cuantos por problemas de salud, bajo licencia extrapenal. A otros los obligo a exiliarse. La mayoría permanece en crítico cautiverio. Guardan silencio respecto al tema para evitar la vergüenza de aceptar que tienen disidentes a punto de morir tras las rejas.
Los familiares de estos prisioneros se unieron para reclamar justicia por estos luchadores por la libertad. El gobierno cubano nunca se refirió al motivo real de existencia de esta organización. No explicaron que las Damas de Blanco surgieron después de los juicios sumarísimos de los prisioneros de la Primavera Negra de Cuba.

A la ‘justa’ Revolución Socialista no le convenía decir a nuestro pueblo por que luchaban estas mujeres. ¿Que era lo que pedían en su protesta? ¿Que reclamaban frente al Ministerio de Justicia cubano?

Pero esa verdad ignorada principalmente por nuestro pueblo no debía ser revelada. Parece que las únicas que tienen derecho a pedir justicia por sus encarcelados esposos espías, son las mujeres de sus cinco héroes.

Ellas si tiene la facilidad de viajar por el mundo pidiendo la libertad de sus esposos. Ellas si gozan de los privilegios del gobierno, quien financia sus campañas y las mantiene económicamente.

Cuando sus esposos abandonaron el país como disidentes solapados, ellas los siguieron para vivir del sueño americano y lo disfrutaron hasta que les duro.

Las esposas de los 75 siguen aquí. Piden con firmeza y entrega la libertad de sus seres queridos. A ellos no les dieron la posibilidad de defenderse de una maquinaria estatal y política que les cayó encima sin ninguna piedad. Ellas tienen quien las defienda y cuentan con el apoyo de los que defienden la causa que condujo a sus esposos a la cárcel.

Podrán decir y tratar de probar lo que quieran. Su impotencia es tal que ahora tratan de vincularlas al terrorismo. Sin embargo, jamás podrán probar que ellas han realizado actos de violencia de ningún tipo contra el gobierno.

Su misión es llamar la atención y reclamar justicia sobre el caso de los 75. Sus actividades concretas son enviar cartas al gobierno cubano, a jefes de estados, personalidades mundiales. Siempre han insistido que no son una organización política.
laritzadiversent@yahoo.es


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