jueves, 22 de mayo de 2008

Nueva doctrina de confrontación, Aleaga Pesant



El Vedado, La Habana, 27/04/2008 (Semanario digital Primavera) El General de Brigada Legra Sotolongo, Jefe de la Región Militar Santiago de Cuba, presencio el pase de revista de las tropas, para dar comienzo al periodo de instrucción militar del 2008, en el territorio oriental. ¿Es ajeno el Brigadier? a las estrategias de confrontación previstas al sur de su territorio y donde estarán involucrados los soldados a su mando.

La propuesta de Hugo Chávez de establecer una estrategia de defensa conjunta y articular las fuerzas armadas unificadas de los países del ALBA, no es nada nuevo. Especialistas lo vaticinaban desde hace al menos dos años, luego de hablarse de la unificación de Venezuela y Cuba, y el “golpista” prometiera la intervención militar venezolana, si la isla era atacada.

Aunque el Presidente de Nicaragua, Daniel Ortega, se apresuró a aplaudir y sumarse a la iniciativa. Rápidamente se descalificó la opción por fuerzas políticas nicaragüenses, que tacharon al sandinista de irresponsable, por definir temas fuera de su autoridad.

El otro animador de la propuesta es el Presidente de Bolivia, Evo Morales. Medios de prensa y políticos democráticos de Bolivia, denuncian la presencia de tropas venezolanas en ese país a tono con ciertos acuerdos militares entre la Paz y Caracas.

Por su parte el Presidente de Ecuador, evadió dar una repuesta positiva al proyecto, gracias al complicado escenario que enfrenta por la resistencia democrática de los partidos opositores a sus tendencias dictatoriales.

No es de extrañar que la visión militar bolivarista, incluya en su estrategia de “defensa continental”. En ella se incluye, además de los ejércitos de Venezuela, Cuba, Bolivia, Nicaragua y Dominica, a los grupos narco-terroristas FARC y ELN de Colombia. Ejemplo de esto, son los trámites realizados por el presidente venezolano para legitimarlos y darle el nivel de beligerantes, a nivel internacional.

Un elemento adicional es el aumento de las tensiones en la frontera colombo venezolana, gracias a las continuas provocaciones del Hugo Chávez y su gobierno, así como la constante ingerencia en los asuntos internos de Colombia, bajo la justificación de tema humanitario.

La Habana por su parte no da opiniones al respecto. Primero por que nunca quiere enfrentarse a los Estados Unidos en el ámbito militar más allá de la retórica discursiva; pero tampoco quiere desanimar actual sponsor, suministrador exclusivo de combustibles y créditos.

La sobre vivencia del anacrónico sistema político cubano, en las cercanías de una potencia como los Estados Unidos, se basa en no llevar el enfrentamiento mas allá de la retórica y eso parece que no le complace al muy conflictivo Chávez.

La única confrontación militar directa entre cubanos y norteamericanos, fue un desastre para los soldados cubanos. Ocurrió en octubre de 1983 en Granada, una isla del caribe oriental. El enfrentamiento se saldo con un lamentable record de todos los cubanos sobrevivientes prisioneros.

Es muy probable que la totalidad de los mandos medios y parte importante de los altos mandos del ejército cubano estén ajenos a las propuestas chapistas, por el reconocido control que sobre la información ejerce la “dictadura del proletariado” y toda vez que desconocen, los valores de la seguridad nacional y son entrenados para la subordinación ideológica.

Venezuela encabeza un llamativo rearme en la región, en los últimos tres años, que es seguido por Chile y Brasil a nivel continental. En Moscú, Caracas hizo contratos por más de cinco mil millones de dólares en la industria de la guerra; además arma un ejército de más de medio millón de hombres, compra 300 mil fusiles de asalto, 30 aviones caza bombarderos Sukhoui-30, más de 50 helicópteros, entre los que están Mi-17, que participaron en el rescate de dos colombianas secuestradas por la guerrilla, los eficaces Mi-25 “Black Hawk”; También negocia nuevas naves de superficie para la armada y analistas señalan que trata de comprar submarinos.

La presencia de tropas venezolanas en Cuba no es nueva. Tropas ingenieras del ejercito suramericano, construyeron un conjunto habitacional en la zona mas occidental de Pinar del Rió, luego del paso de un ciclón de turno. Barcos de la armada suramericana atracan constantemente en muelles cubanos especialmente en la bahía de La Habana.

Mientras tanto, los soldados orientales desfilan ante su jefe, sin saber ni jota de lo que sucede a unos cuantos cientos de kilómetros al sur. Ni si se reajusta la doctrina militar, que marcará su vida o la muerte.
aleagapesant@yahoo.es
http://prolibertadprensa.blogspot.com/




2 comentarios:

Anónimo dijo...

El Brigadier Legra Sotolongo y sus tropas son carne de cañón. El se encuentra muy a gusto pasando revista y gritando ordenes, pero desconoce totalmente lo que representaría el tener que enfrentarse a una Fuerza de Tarea del la Infantería de Marina. No podría ni siquiera cumplir su objetivo primario de defender a Santiago de Cuba. La 4ª Flota, con base en Cayo Hueso, Florida, fue activada y patrulla las aguas entre Cuba y Venezuela. Digamos que estrategicamente su intención no sea efectuar acciones ofensivas hacia el Norte o el Sur, pero desde un punto de vista táctico esa flota está cortando la retirada a ambas fuerzas comunistas. seamos prácticos el afán armamentista de Chavez no es para entrar en guerras extranjeras (él sabe más que eso). Todo ese armamento va dirigido a hacerle la guerra a los venezolanos ¿armas para qué? ¿Se acuerdan de esa frase? Frente a 4ª Flota, el Brigadier Legra, ni diez iguales a él, pueden defender a Santiago. Chávez tampoco podría ni siquiera defender La Güaira. ¿Qué batalla naval fue la que selló la derrota de la Armada Española en la Guerra del 98? Me parece haber leído en algún sitio que fue en Santiago de Cuba... No es lo mismo llamar al diablo que verlo venir.

Anónimo dijo...

De la misma forma, no es lo mismo, ni se escribe igual, estar en el polígono practicando el tiro, que cuando el blanco esta devolviendo el fuego. Legra Sotolongo es un gritón de cuartel.