jueves, 28 de agosto de 2008

Editorial Nro 35, Ocupados y culpables


Con una población penal calificada como desproporcionada por organismos consagrados al análisis y seguimiento del tema, Cuba mantiene y ha mantenido como norma en las últimas décadas, varios centenares de prisioneros políticos.

Hay muchas razones para ello, aunque todas sean por principio, inaceptables. Ninguno de los hombres y mujeres que en la actualidad guardan prisión en Cuba por motivos políticos, es alguien que pudiera ser calificado como violento. Permanecen cautivos de un régimen que tiene pavor a las disensiones y suele caer en pánico.

No son sólo los opositores los enemigos que teme el régimen. En su paranoia, perciben como peligrosa toda actividad que escape de su control, aún las más simples que sólo busquen la subsistencia. Así, convierten a cada ciudadano en un potencial sospechoso.

Las batidas de las autoridades contra la corrupción, la indisciplina social y las ilegalidades, se han convertido en una verdadera guerra contra todo el pueblo. La policía se convierte en un ejército de ocupación. Cada barrio, un foco de resistencia.

El ciudadano de a pie, obligado a delinquir para sobrevivir, se convierte en un objetivo de las redadas policiales. De una forma u otra, a los ojos de las autoridades, todos somos culpables.

Apelar una vez más a la represión nada conseguirá. Liberar definitivamente las fuerzas productivas debe ser el primero de los pasos necesarios para procurar el adecentamiento ciudadano.

Pero las causas de la crisis que vive la sociedad cubana no sólo son económicas. Mucho ha tenido que ver la pérdida de valores morales causada por la desintegración familiar durante las largas décadas del experimento revolucionario.

Es previsible que bajo el régimen de los sucesores, que parecen continuar la terca apuesta por el inmovilismo, continúe el crecimiento de la población penal. Inevitablemente, no será sólo la cantidad de presos comunes la que aumente. También serán más los presos políticos en las cárceles cubanas. Es otro de los círculos viciosos de los que no logra salir el régimen.
SDP

1 comentario:

Bauta dijo...

Hola amigos,
Me han otorgado un premio que parece por estos días galopar la blogocosa criolla. Se solicita hacerlo extensivo a otros de mi preferencia así es que aquí lo dejo, como muestra de mi solidaridad, admiración e infinito respeto. Sepan que se les lee a diario!

Las bases del premio son:
Premio Brillante Weblog para que los premiados sigan premiando:
• Al recibir el premio, se ha de escribir un post mostrándolo y citando el nombre del blog Web que lo ha otorgado, enlazándolo al post de ese blog o Web que lo ha concedido.
• Elegir un mínimo de siete blogs (pueden ser más) que creas que brillan por su temática y/o su diseño, para otorgarles el premio a tu vez. Escribir sus nombres y los enlaces en tu blog.
• Avisarles de que han sido premiados con el premio “Brillante Weblog”, incluyendo en el texto las Bases del concurso, para que continúen la red.

Saludos!