Santos Suárez, La Habana, febrero 12 de 2009 (SDP) El vicepresidente Carlos Lage era uno de los siete vice del Consejo de Estado, una especie de senador romano al estilo castrista. Pero Raúl Castro lo echó a un lado y anuló sus funciones de canciller itinerante que representaba a Fidel Castro en todo cónclave foráneo.
El poderoso miembro del Buró Político (son 13) del Comité Central del Partido Comunista de Cuba y también Secretario Ejecutivo del Consejo de Ministros, definido como el zar de las finanzas bajo el mandato de Fidel, quedó relegado a ser edecán del presidente de la Asamblea Nacional del Poder Popular, Ricardo Alarcón.
Ahora, Lage chequea tibiamente los daños que provocaron los ciclones Gustav, Ike y Paloma. Sin embargo, la gente de a pie lo identifica como el represor de la economía popular. Junto a Fidel, se deleitaba en subir los precios de los productos de primera necesidad de la red de tiendas en divisas, incluyendo la tasa del 20% al dólar norteamericano.
Hoy, el nuevo zar de las finanzas en el Raulato es el coronel Rodríguez Callejas, yerno de Raúl Castro y jefe de la Sección V de la Contra Inteligencia Militar (CIM), subordinada al Ministerio de las Fuerzas Armadas (MINFAR). Es un súper ministerio de hacienda, finanzas, precios y planificación de la economía.
El pueblo se alegra de la caída del oportunista con doble cara que fingía ser modesto con camisas de obrero de 5 pesos. Sin embargo, el galeno con gustos exquisitos visita a menudo Cayo Largo del Sur con los 15 miembros de su familia. Pasean en yate, degustan whisky. Cayo Largo del Sur es un paraíso para millonarios de Colombia, Venezuela y México, algunos de los cuales trafican con drogas.
La otra nueva tarea de Lage es ayudar a escribir y poner en orden las ideas de Fidel Castro para su libro 50 años de Revolución Cubana. Así están las cosas hoy en Cuba.
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