La Habana, setiembre 11 de 2008, (SDP) Una regulación desampara a los trabajadores agrícolas y les priva de sus derechos cuando cambian de sector laboral. La misma es fuente de descontento y críticas al gobierno. Los campesinos cubanos quedan desamparados y abandonados a su suerte en la ancianidad.
Los campesinos que aceptaron integrarse en las Cooperativas de Producción Agropecuaria (CPA) obtuvieron su derecho a la jubilación. Los que se aferraron a sus propiedades, quedaron privados de la seguridad social y sus beneficios.
En los primeros tiempos, muchos campesinos cuando llegaban a la ancianidad entregaron sus tierras a cambio de una pensión. Las nuevas condiciones creadas marcan la diferencia a partir de la cual, ya no hacen falta sus tierras. Hoy el estado necesita brazos que cultiven y labren y no habrá más jubilaciones a partir de tierras entregadas.
SDP
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