Prisión Provincial Canaletas, Ciego de Ávila, 14 de mayo de 2009, (SDP) Siempre he aplaudido la llegada al poder de cualquier partido por elecciones libres, transparentes y democráticas sin que en ello importe su ideología. Para mi cuenta el poder del pueblo, si este se equivoca sabrá rectificar.
Recuerdo el ascenso al poder del presidente venezolano Hugo Chávez. Surgieron muchos detractores y muchos seguidores. Preferí escribir y en su momento alerté a los venezolanos sobre las nuevas reformas impuestas por Chávez a su pueblo. Un día, a nosotros los cubanos nos prometieron lo mismo y con el transcurrir de los años, son los turistas y la nomenklatura gobernante quienes disfrutan lo mejor de Cuba.
A Evo Morales, le reconozco su condición de pobre e indígena. Que recuerde, en Bolivia, ningún indio ha llegado tan alto en política. Aclaro que no comparto su filiación política, no tengo que hacerlo. En cuanto a Rafael Correa, tengo mis reservas, pero su pueblo lo eligió y es lo único que importa. Posee una virtud rara en los políticos de hoy: dice lo que siente sin miedo al qué dirán.
Otros líderes de Latino América de tendencia izquierdista han alcanzado la presidencia. Pienso que esto es mucho mejor que las atroces dictaduras que cercenaron la vida de miles de sus coterráneos en el pasado. El caso más curioso es el del mandatario nicaragüense Daniel Ortega.
Ortega luchó a brazo partido en la lucha armada contra la dictadura de Anastasio Somoza y venció. Cumplió con su pueblo e hizo elecciones libres que perdió frente a Violeta Chamorro en buena lid. Lo aceptó y siguió fiel a sus ideas. Fue una y otra vez a elecciones democráticas y luego de varios intentos, regresó al poder.
Para concluir, debo decir, que no apoyo el embargo estadounidense contra el régimen cubano. Comparto este sentimiento con los mandatarios antes mencionados y otros. Ahora pregunto a todos estos dignatarios: ¿Cuántos han instado al gobierno de La Habana a liberar a los presos políticos? ¿Cuántos lo han hecho para qué realicen elecciones democráticas y transparentes?
Les recuerdo la vocación democrática de los cubanos. No olviden que el cubano necesita pan para vivir, pero no sólo de pan vivimos los cubanos. Ustedes que son amigos del gobierno cubano, pueden influir. Les dejo esta última palabra.
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