jueves, 6 de noviembre de 2008

UN BLOQUEO QUE JUSTIFICA, Laritza Diversent


Arroyo Naranjo, La Habana, noviembre 6 de 2008, (SDP) El diferendo Cuba-Estados Unidos, su bloqueo económico y comercial o sanción-embargo, como quiera llamársele, son temas tediosos para los cubanos. Para los de adentro, son como una justificación, que por más de 49 años, sirve a la dirigencia histórica para perpetuarse en el poder.

“185 países de los 192 miembros de las Naciones Unidas, apoyaron la resolución cubana que insta a Washington a cesar su política de cerco a Cuba”, informa el diario Granma en su edición del 30 de octubre.

El hecho se publica en todos los periódicos y la televisión oficialista de la isla. Hasta se vende un tabloide especial, que contiene el informe de Cuba en virtud de la resolución 62/3 de la Asamblea General de las Naciones Unidas.

Marta, de nueve años de edad, que cursa el cuarto grado de la educación primaria, cree que al fin se acabará el bloqueo. Yadira de 18 años, estudiante de politécnico de informática, no entiende por qué Estados Unidos no cumple lo exigido, por decimoséptima vez, en las resoluciones del máximo órgano internacional.

Los medios de comunicación oficialista olvidaron explicar que las resoluciones de la Asamblea General de las Naciones Unidas no tienen efectos vinculantes para los Estados que la integran. En otras palabras, no es de obligatorio cumplimiento para sus miembros. Son resoluciones con valor moral, que en cierta medida influyen en la opinión pública mundial, pero nada más.

Pudiera pensarse que la victoria alcanzada es de poco valor o insuficiente. Pues es todo lo contrario. El gobierno cubano no solo se vanagloria de su !Victoria de la razón¡ La utiliza para justificar su mala gestión gubernamental ante el pueblo.

Les permite vender al gobierno norteamericano como inhumano y desalmado. Este es uno de los objetivos de no dar a conocer los efectos jurídicos de las decisiones del referido órgano internacional.

En la edición del 29 de octubre, el Diario Granma publicó un articulo titulado “Debaten acerca de los derechos laborales y la seguridad social”, en el que explica que el bloqueo económico y comercial impuesto por el gobierno estadounidense, impide que el sistema de seguridad social cubano brinde una atención especializada y garantice un buen servicio.

El embargo no resuelve ningún problema. Si hace daño, lo sufre más el pueblo que la dirigencia que lo gobierna. Vivimos perennemente en pie de guerra, sometidos a represión y privados de libertad.

¿Las restricciones del 2004 a quien verdaderamente afectaron? ¿Al gobierno de la isla? No. A los ciudadanos que a partir de ese momento tuvieron que compartir el 20 % de lo que a sus familiares, residentes en los Estados Unidos, les estaba permitido enviar para satisfacer a medias sus penurias.

Incluso es hasta complicado entenderlo. Hay contradicciones que hacen suponer que es simplemente un impedimento formal. Existe bloqueo económico, pero Estados Unidos es el quinto socio comercial de la isla. ¿Será acaso una discusión por ver quien se lleva, al cabo de 48 años, la victoria política por la resistencia?

Tenemos una economía empobrecida y bloqueada, sin embargo, el gobierno cubano invierte millonarias cifras en equipos de alta tecnología para donarlos a hospitales bolivianos.

De que sirve un bloqueo que justifica las malas condiciones de vida de los cubanos, pero que permite al gobierno llevar adelante políticas de expansión del socialismo del siglo XXI por toda América. Justificaciones y más justificaciones es lo que proporciona el bloqueo norteamericano al gobierno cubano.
laritzadiversent@yahoo.es

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