jueves, 7 de mayo de 2009

REFLECTOR DEL MUNDO, APAGÓN DE SU PAÍS, Ramón Díaz-Marzo

La Habana Vieja, La Habana, mayo 7 de 2009 (SDP) No deseo para Cuba el modelo de gobierno conocido como democracia representativa que practican los Estados Unidos y que los gobiernos de Latinoamérica han copiado. Como tampoco deseo, y ya no soporto más, el Totalitarismo de Estado que ha regido a Cuba durante los últimos 50 años de “ordeno y mando” donde se han perpetrado toda clase de arbitrariedades que podrían calificarse de terrorismo de Estado contra la población cubana y sus propios dirigentes.

Si fuera norteamericano, me opondría rotundamente a la “Asociación Nacional del Rifle”. Según refleja la Constitución de los Estados Unidos, todos los ciudadanos tienen el derecho de portar armas de fuego. También me opondría al “libre mercado”, donde el punto de la brújula que rige, es la ganancia personal y el objetivo no es el bienestar de la colectividad, sino el egoísmo personal.

En cuanto a Cuba, sería insoportable heredar otro caudillo que siempre estará por encima de la Ley sin importarle la opinión y necesidades del pueblo.

En cuanto a los Estados Unidos, pienso que la “Asociación Nacional del Rifle” no es el origen de todos los males que azotan a esa sociedad, pero es el más fuerte porque de ahí salen todas las armas para el narcotráfico que azota a los pueblos de nuestro hemisferio.

Ahora mismo tenemos una crisis económica en Estados Unidos que dicen que es cíclica. Yo opino que no. La crisis económica actual de los Estados Unidos es el síntoma irreversible de que el modelo de capitalismo brutal ya comenzó a reventar. Y si ahora Estados Unidos dice que abandonará la Ley del Garrote con sus vecinos, no lo hacen porque sean buenas gentes, sino porque ya reventaron.

Desgraciadamente lo que dice nuestro Dictador en Jefe, Fidel Castro Ruz, cuando no se cansa de gritar desde el año 1979 en la ONU “que es necesario un Nuevo Orden Económico Mundial”, es cierto.

En una de sus últimas reflexiones, el Dictador en Jefe ha dicho que una de las primeras medidas que deben tomarse para reajustar el capital en el mundo es “eliminar los paraísos fiscales”. Estoy de acuerdo, pues en los “Paraísos Fiscales” es donde se lava y renegocia el dinero proveniente del tráfico de drogas y armas y se guardan los fondos que abastecen al terrorismo internacional. Además, muchos respetables ladrones de cuello y corbata guardan en esos “paraísos fiscales” sus capitales, incluyendo a políticos corruptos y dictadores de toda laya.

No hay que ser economista o comunista para darse cuenta que el mundo necesita un nuevo orden económico mundial.

¿Pero realmente el mundo cambiará, incluidos los EEUU? Tal vez, pero no tan pronto. Téngase en cuenta que hablamos de unas ruedas dentadas enormes e incontables.

Mientras tanto, mientras el capitalismo brutal comienza a derrumbarse, ¿qué puede hacer Cuba que ya se derrumbó y explotó hace muchos años? Cambiar. La propuesta de la administración de Barak Obama de autorizar los viajes y el envío de remesas a Cuba y la liberación de los presos políticos para una posible suspensión del embargo, debemos aceptarla sin pensarlo dos veces, pues con ello, en medio de una seria crisis económica mundial, podría mejorar la economía cubana y hasta darle más estabilidad al gobierno/dictadura.

Permitan que la Internet llegue a cualquier cubano que lo desee y permitan que el mundo de las comunicaciones para los cubanos de a pie se abarate. La Dictadura de los Castro no tiene que tenerle miedo a la información que nos llegará de otros medios. La propia industria del ocio y los grandes medios de comunicación le mostrarán a los cubanos, mejor que nuestra prensa oficial, que el capitalismo brutal no es el mejor de los mundos posibles.

Ahora mismo se han juntado en México dos calamidades: una guerra entre los carteles de la droga y el gobierno, y una pandemia de fiebre porcina que no sabemos cómo terminará.

Lo único preocupante en todo este asunto de un reinicio de relaciones entre Cuba y los Estados Unidos es que los miembros de la Seguridad del Estado cubana tendrán que sudar la gota gorda y trabajar de verdad para impedir que el espionaje terrorista se haga efectivo dentro de la Isla. No podrán vegetar como actualmente lo hacen corriendo detrás de los pobres periodistas independientes cubanos (más de medio centenar de colegas cumplen largas condenas), opositores pacíficos, cuentapropistas, y todo el espectro infeliz de nuestra sociedad que lucha por la libertad que realmente nunca hemos tenido.
ramon597@correodecuba.cu

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