San Miguel del Padrón, La Habana, agosto 20 de 2009 (SDP) José tuvo una visión y la contó a sus hermanos diciendo: “He aquí que he tenido otra visión, y he aquí que el sol y la luna y once estrellas se inclinaban a mí”. (Génesis 37:9).
Quien tiene un sueño, conoce a lo que tiene que renunciar con el propósito de avanzar. ¿Cuáles sueños te quitan el sueño en tu vida? ¿Hacia donde te diriges? Recuerda, los mejores sueños son los que Dios siembra en tu corazón, porque ellos se convierten en realidad.
“Al principio de tus ruegos fue dada la orden y yo he venido para enseñártela porque tú eres muy amado. Entiende pues la orden y entiende la visión”. (Daniel 9:23).
El mundo de un ciego está limitado a lo que toca; el mundo de un ignorante queda dentro de los límites de su conocimiento; el mundo de un gran hombre, a los límites de su visión. Si su visión es grande, así será su potencial para el éxito.
La Biblia está compuesta aproximadamente en una tercera parte de sueños, revelaciones y visiones. Inclusive el último de sus libros, Apocalipsis, está compuesto completamente de revelaciones y visiones. La palabra “visión” aparece 43 veces en total en la Biblia, 34 en el Antiguo Testamento y 9 en el Nuevo Testamento. La gran mayoría se encuentra en los libros proféticos.
La “visión” no está limitada únicamente a la acción física de ver, sino que incluye la visión profética, mediante la cual se comunican los mensajes divinos.
Desde siempre han existido ciegos con visión: Homero, Stevie Wonder, Jorge Luís Borges…
¡Que tristeza por los que carecen de Visión y se pierden los mensajes divinos! Dice en Proverbios 29:18: “Donde no hay visión, el pueblo se desenfrena”.
imorejon@yahoo.es Quien tiene un sueño, conoce a lo que tiene que renunciar con el propósito de avanzar. ¿Cuáles sueños te quitan el sueño en tu vida? ¿Hacia donde te diriges? Recuerda, los mejores sueños son los que Dios siembra en tu corazón, porque ellos se convierten en realidad.
“Al principio de tus ruegos fue dada la orden y yo he venido para enseñártela porque tú eres muy amado. Entiende pues la orden y entiende la visión”. (Daniel 9:23).
El mundo de un ciego está limitado a lo que toca; el mundo de un ignorante queda dentro de los límites de su conocimiento; el mundo de un gran hombre, a los límites de su visión. Si su visión es grande, así será su potencial para el éxito.
La Biblia está compuesta aproximadamente en una tercera parte de sueños, revelaciones y visiones. Inclusive el último de sus libros, Apocalipsis, está compuesto completamente de revelaciones y visiones. La palabra “visión” aparece 43 veces en total en la Biblia, 34 en el Antiguo Testamento y 9 en el Nuevo Testamento. La gran mayoría se encuentra en los libros proféticos.
La “visión” no está limitada únicamente a la acción física de ver, sino que incluye la visión profética, mediante la cual se comunican los mensajes divinos.
Desde siempre han existido ciegos con visión: Homero, Stevie Wonder, Jorge Luís Borges…
¡Que tristeza por los que carecen de Visión y se pierden los mensajes divinos! Dice en Proverbios 29:18: “Donde no hay visión, el pueblo se desenfrena”.
No hay comentarios:
Publicar un comentario