jueves, 5 de marzo de 2009

HOUDINI, LOS CALZONCILLOS y LA INDUSTRIA LIGERA Paulino Alfonso



Lawton, La Habana ,28 de Febrero de 2009 (SDP) Un día en que los cubanos de a pie,tuvimos suerte con la obtusa TV castrista , tuve la oportunidad de ver ese clásico que es El Gran Houdini.

Como en crónicas anteriores he mencionado como nació el gran logro revolucionarios de la libreta de racionamiento alimentario y lograr que todos los cubanos piensen lo mismo, sientan lo mismo y anhelen lo mismo (¿que como mañana?, estoy en el infierno o me voy aunque sea a Somalia).

Les voy a contar un acto de magia, digno del gran nigromante judío. Me referiré a la única libreta que al desaparecer en 1990 abrió un filón de oro más grande que el encontrado en California. O la fuga de Houdini en Rusia, magia pura.

Mágico también, es que nadie se haya percatado de uno de los mayores trucos de la Corte de los Milagros perdón, del gobierno castrista.

Para que el lector extranjero, me pueda entender, sin acrobacias mentales, le explico, que en la constelación de ministerios e instituciones civiles, por ende anodinas, creados por el castrismo en Cuba, como dice la Biblia, “a imagen y semejanza” de la URSS, había uno, que se destacaba por lo kitsch de sus producciones, por no decir m..... Como se dedicaba al consumo popular, a Castro I no le preocupaba quien era ministro. Podía haber sido Tin Tan, Cantinflas o Pototo. Hasta Carlos Otero, para el caso daba igual.

Todo cubano mayor de 30 años se acuerda de los Reyes Magos socialistas, que solo traían un juguete anual. No recogían cartas, sino cupones de la Libreta industrial, después que Mamá y Papá, habían estado 6 días con 6 noches en una cola asesina. Pero era para los hijos y eso era lo que importaba.

¿Recuerdan los calzoncillos por pañuelos, de un pantalón y una camisa anuales y 2 pares de media por una camiseta y un par de zapatos extras para los novios? No sigo para no abrumarlos. Pero dejemos la reseña y vayamos al grano.

Esta hermana bastarda de la industria alimentaria, ya que su creador fue el también comunista (no castrista), Manuel Luzardo, reguló por 27 años todo lo que mi pueblo vestía, desde los calzoncillos hasta las camisas. Pero al no poder resolver NADA, el cortesano de turno hizo a su majestad Castro I la pregunta trascendental: ¿Qué hacer? El soberano respondió con la celeridad del rayo: Quítala, para que vamos a gastar papel en algo que no sirve.

Ah, pero recordar que los buenos magos siempre juegan con una carta en la manga.

A los 3 años , comenzaron a florecer “firmas” desconocidas por los asombrados cubanitos , tales como Suchel ,Ensuna, Biconsa, Profiel, hasta Euskera Elaz Komerxio (sic) que se dedicaban a la venta de todo lo que nos había regulado por 30 años la Sra. Libreta Industrial. Ay, pero en Cuba, siempre hay un pero, se vendían en Fulas, no en dinerito cubano.

Ahora voy a hacerles un truco. ¿No lo creen? Lean. Cierren los ojos, salgan de Europa occidental, porque la otra todavía no se ha recuperado de la pesadilla. Imaginen un niño de 7 años, que solo tiene un par de zapatos, que han hecho mas viajes al zapatero que los que el difunto Papa Juan Pablo II hizo en vida. Un par de buenos zapatos cuestan el salario mensual suyo y el de su mujer. Piensen que es su hijo. Abran los ojos, miren a sus hijos ¿Como se sentirían? Yo lo sé, lo viví al igual que el 99.5 % de mi pueblo. El 0.5 restante son el soberano y los cortesanos
Los que hace falta que lo sepan son esos que aun cantan, con voz trémula, loas y parabienes al Anciano, y otros que le desean lo peor, pero siempre desde la comodidad del capitalismo. No tienen las hormonas para, como diría el difunto condotiero argentino, (sic)” No se trata de desearle suerte al agredido, sino compartirla juntos “.

De paso les voy a explicar la cuadratura del círculo, es decir, a cuanto ascendió la desaparición de la libreta industrial. Por remesas familiares, desde 1993 al 2008, se han recibido aproximadamente 13.5 billones de USD, y 139.5 millones por salarios a las empresas seleccionadas, lo que hace un total de 13.6 billones USD.

Pues bien, de esa suma se han invertido, en Ropa y Zapatos la “bobería” de 6.7 billones USD.
¿Vieron el truco? Seguro que Houdini no lo hubiera hecho mejor.

Para finalizar, un chiste. Cuando Brezhnev visitó Cuba , vio a un miembro de la guardia, soplarse la nariz con un pañuelo y le dijo a Castro : Fidel , soldado no tener calzoncillos ; a lo que Castro asombrado , preguntó: ¿Cómo usted sabe eso, camarada? La respuesta del ruso fue: Fácil, si comprar pañuelo, no comprar calzoncillos.
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