Arroyo Naranjo, La Habana, junio 25 de 2009, (SDP). Llegué alrededor del mediodía del 20 de junio, vísperas del día de Los Padres, a la casa de Laura Pollán. Alrededor de 30 Damas de Blanco, madres, esposas e hijas de los prisioneros políticos y de conciencia, se acotejaban para su té literario número 73. La confraternidad y el ánimo compartido dentro de aquel hogar, hacían de cada una de ellas, propietarias de la razón y el deber que les asiste en cada carta leída o en cada caminata por la 5ta Avenida.
Loida Valdez, esposa de Alfredo Felipe Fuentes, condenado a 26 años de privación de libertad en la ola represiva de marzo de 2003, iniciaba el té literario con la lectura de una misiva enviada por el presidente francés Nicolás Sarkozy a través de la escritora Zoé Valdés.
La máxima autoridad gala decía que: “Francia, ya sea a titulo bilateral o en el seno de la Unión Europea, obra con constancia y determinación a favor de la liberación de los presos políticos cubanos {…} Los derechos humanos están de este modo en el corazón de las relaciones con ese país”.
En cuanto a la situación actual de los prisioneros políticos, algunos en huelga de hambre por negarse a usar el uniforme de recluso, la activista Laura Pollán, esposa de Héctor Fernando Maseda Gutiérrez, dijo:
“Se está recrudeciendo la represión. Parece que se aproxima la visita del relator de Naciones Unidad contra la tortura y esto hace que el gobierno esté tomando medidas en todas las prisiones. Quiere decir, qué el gobierno cubano se siente presionado y a la vez están presionando y obligando a los presos a que se pongan el uniforme”.
Respecto a la medida penitenciaria, Berta Soler, esposa de ( ), comunicó a las presentes que “Diosdado Gonzáles Marrero y Nelson Molinet Espino se encontraban en huelga de hambre hacía 11 días”.
Algo triste y a la vez reconfortable por la solidaridad de las demás mujeres fue la víspera del Día de Los Padres para Reina Luisa Tamayo, madre de Orlando Zapata Tamayo, condenado a 25 años de penitencia. “Mi hijo fue golpeado por agentes del penal y un recluso, cuando se le practicaba una requisa el pasado 28 de marzo {…} Yo y José Marino Ortiz, su padre de crianza, estamos pendiente de su situación, ya que debido a uno de los golpes en el cuello, Orlando fue intervenido quirúrgicamente”.
Enilda Tanquero Roque, madre de Jorge Luís Gonzáles Tanquero, dijo a éste reportero que su hijo “debe estar muy triste porque no tiene a su papá y a la vez no puede estar con sus hijos {…} Jorge Luís perdió a su padre hace tres años. De sus tres hijos, dos viven en los Estados Unidos”.
Milka María Pena Martínez, esposa de Luís Enríquez Ferrer García, condenado a 28 años de prisión por el régimen, manifestó: “dios quiera que podamos abrazarnos todos en libertad, en una Cuba libre”.
María Libertad, de seis años de edad e hija de Luís Enríquez Ferrer, nació días después de la llamada Primavera Negra. Fue inscrita con ese nombre en honor a su padre.
“Su madre murió hace un año y el padre es quien se encarga de las visitas a la prisión de 5 y Medio en Pinar del Río”, dijo Nelida Borrero Aragón, tía de Horacio Julio Piña Borrego, también encausado en la primavera negra. Horacio tiene tres hijos y la más pequeña apenas cumple los dos meses de nacida.
“En cuanto al Día de Los Padres, nosotras estamos representándolos, ya que ellos no pueden estar aquí”, fueron palabras de Melba Santana, esposa de Alfredo Rodolfo Domínguez Batista, confinado a 14 años de privación de libertad en el 2003.
Se hizo saber también, en voz de las Damas de Blanco, la unánime decisión de los prisioneros políticos y de conciencia de no ser canjeados por los cinco espías de Castro.
Más que modestas impresiones, lo que me llevé de aquel té literario fue la imagen de mujeres que asumen también el rol de padres, prestas a defender la dignidad de su familia y de toda la nación.
odelinalfonso@yahoo.com
Loida Valdez, esposa de Alfredo Felipe Fuentes, condenado a 26 años de privación de libertad en la ola represiva de marzo de 2003, iniciaba el té literario con la lectura de una misiva enviada por el presidente francés Nicolás Sarkozy a través de la escritora Zoé Valdés.
La máxima autoridad gala decía que: “Francia, ya sea a titulo bilateral o en el seno de la Unión Europea, obra con constancia y determinación a favor de la liberación de los presos políticos cubanos {…} Los derechos humanos están de este modo en el corazón de las relaciones con ese país”.
En cuanto a la situación actual de los prisioneros políticos, algunos en huelga de hambre por negarse a usar el uniforme de recluso, la activista Laura Pollán, esposa de Héctor Fernando Maseda Gutiérrez, dijo:
“Se está recrudeciendo la represión. Parece que se aproxima la visita del relator de Naciones Unidad contra la tortura y esto hace que el gobierno esté tomando medidas en todas las prisiones. Quiere decir, qué el gobierno cubano se siente presionado y a la vez están presionando y obligando a los presos a que se pongan el uniforme”.
Respecto a la medida penitenciaria, Berta Soler, esposa de ( ), comunicó a las presentes que “Diosdado Gonzáles Marrero y Nelson Molinet Espino se encontraban en huelga de hambre hacía 11 días”.
Algo triste y a la vez reconfortable por la solidaridad de las demás mujeres fue la víspera del Día de Los Padres para Reina Luisa Tamayo, madre de Orlando Zapata Tamayo, condenado a 25 años de penitencia. “Mi hijo fue golpeado por agentes del penal y un recluso, cuando se le practicaba una requisa el pasado 28 de marzo {…} Yo y José Marino Ortiz, su padre de crianza, estamos pendiente de su situación, ya que debido a uno de los golpes en el cuello, Orlando fue intervenido quirúrgicamente”.
Enilda Tanquero Roque, madre de Jorge Luís Gonzáles Tanquero, dijo a éste reportero que su hijo “debe estar muy triste porque no tiene a su papá y a la vez no puede estar con sus hijos {…} Jorge Luís perdió a su padre hace tres años. De sus tres hijos, dos viven en los Estados Unidos”.
Milka María Pena Martínez, esposa de Luís Enríquez Ferrer García, condenado a 28 años de prisión por el régimen, manifestó: “dios quiera que podamos abrazarnos todos en libertad, en una Cuba libre”.
María Libertad, de seis años de edad e hija de Luís Enríquez Ferrer, nació días después de la llamada Primavera Negra. Fue inscrita con ese nombre en honor a su padre.
“Su madre murió hace un año y el padre es quien se encarga de las visitas a la prisión de 5 y Medio en Pinar del Río”, dijo Nelida Borrero Aragón, tía de Horacio Julio Piña Borrego, también encausado en la primavera negra. Horacio tiene tres hijos y la más pequeña apenas cumple los dos meses de nacida.
“En cuanto al Día de Los Padres, nosotras estamos representándolos, ya que ellos no pueden estar aquí”, fueron palabras de Melba Santana, esposa de Alfredo Rodolfo Domínguez Batista, confinado a 14 años de privación de libertad en el 2003.
Se hizo saber también, en voz de las Damas de Blanco, la unánime decisión de los prisioneros políticos y de conciencia de no ser canjeados por los cinco espías de Castro.
Más que modestas impresiones, lo que me llevé de aquel té literario fue la imagen de mujeres que asumen también el rol de padres, prestas a defender la dignidad de su familia y de toda la nación.
odelinalfonso@yahoo.com
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