Ranchuelo, Villa Clara, noviembre 6 de 2008, (Cubanacán Press) Una decena de opositores pacíficos fueron golpeados por agentes represivos, en una céntrica calle de La Habana, para que no entregaran una carta ante el Ministerio de Justicia, el 23 de octubre último.
Los oponentes no violentos burlaron la vigilancia de la Seguridad del Estado en Villa Clara, que rodeaba a la vivienda de Idania Yánez Contreras, presidenta de la Coalición Central Opositora (CCO), donde ella y el emblemático ex – preso político Jorge Luís García Pérez (Antúnez) realizaban una Huelga de Hambre.
Alcides Rivera Rodríguez, de la CCO, esposo de Idania y uno de los oponentes agredidos, informó que diez de los disidentes que respaldaban la abstinencia de alimentos sólidos, llegaron a la populosa esquina de las calles 23 y 12 en el barrio del Vedado y comenzaron a caminar por toda la calle 23 en dirección a La Rampa.
Debido a los 8 días de ayuno de Yánez Contreras y García Pérez, se cansaron rápidamente y decidieron abordar un ómnibus articulado P-9 para llegar más pronto a la sede del Ministerio de Justicia, sito en la calle O entre 23 y Humbolt, en la propia barriada.
El autobús fue interceptado por tropas y automóviles de la Policía Especializada y oficiales vestidos de civil de la Policía Política, en la importante intercepción de la Avenida Paseo y calle 23. El vehículo resultó asaltado por los represivos, quienes fueron pateados encima de la guagua ante la protesta de los pasajeros.
Con prontitud, fueron arrastrados hacia carros patrulleros que paraban el transito vehicular y llevados hacía la Unidad de la Policía Nacional Revolucionaria (PNR) localizada en las arterias Zapata y C del propio término barrial, donde los esperaron con bastones de goma y allí recibieron una fuerte golpiza.
El militante de CCO Carlos Michael Morales Rodríguez recibió un fuerte golpe en la frente, que le produjo una herida en la frente, de donde le comenzó a manar copiosamente sangre y según dijo Iris Pérez Aguilera: “En ningún momento le ofrecieron asistencia médica, a pesar de viajar un médico con nosotros”.
Tras dos horas de encierro y ser amenazados con largas penas de cárcel, 5 de los opositores fueron montados en un microbús marca Toyota de color azul, así como en una patrulla Peugeot - 404 con la placa # 963, donde fueron montados Antúnez y su esposa Iris Tamara Pérez Aguilera.
En horas de la tarde llegaron a la ciudad de Santa Clara y dejados en sus casas, además de los disidentes ya mencionados Loreto Hernández García, Jorge Luís Artiles Montiel. También Ernesto Ramos Arrozarena residente del municipio Colón en la provincia Matanzas lo dejaron en su domicilio.
Fidel Mojena Rivero e Idalberto Acuña Carabeu, ambos residentes en las municipalidades de Artemisa y Marianao respectivamente, quienes también participaron en la actividad cívica fueron llevados hacia sus hogares. Idania expresó: “Las palizas son terrorismo de estado, ahora están autorizadas, continuaremos en las calles de la patria”.
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